Conforme avanza el tiempo de cara a la temporada 2026 de la Fórmula 1, Checo Pérez adquiere más confianza en el equipo Cadillac a la vez que se apasiona más por este nuevo proyecto, un trabajo con el cual quiere demostrar que aún tiene mucho talento por ofrecer en el Gran Circo y no terminar su historia como parecía que acabaría tras la salida de Red Bull.
“Veo esto como mi gran proyecto final en el deporte y quiero asegurarme de que sea un regreso exitoso”, dijo el mexicano en una entrevista otorgada a la web oficial de Fórmula 1.
“Quiero impulsar al equipo desde el primer día. Creo que podremos sorprender a mucha gente. Ese es nuestro objetivo: tener un impacto fuerte en la Fórmula 1 desde el primer día”, indicó el mexicano, quien no se preocupa por los primeros resultados; para él, lo clave será ver la forma en que terminan la temporada, no solo en puntos, sino en el trabajo de cara al 2027.
“Para mí, es un poco irrelevante dónde empezamos. Lo más importante es qué tan rápido podemos progresar”.
CONFIANZA EN CADILLAC
Luego de estar varios días en Inglaterra en las instalaciones en Silverstone de Cadillac antes de la prueba TPC con Ferrari en Imola, Checo Pérez llegó a la conclusión de que el trabajo en la escuadra americana va por el camino correcto, especialmente al ver “muchas caras conocidas… gente con mucha experiencia y con ganas de demostrar su valor en el deporte”.
Para el mexicano, tener a dos pilotos con experiencia como él y Valtteri Bottas —quien será su compañero de equipo— será un gran aporte, pero también lo es el personal técnico.
“Creo que una cosa es tener todo listo para Melbourne, pero otra es tenerlo listo y competitivo, que es por lo que todos estamos trabajando. Tener toda esa experiencia alrededor realmente nos ayuda mucho”.
A diferencia de su última etapa en Red Bull, el mexicano indicó que se siente nuevamente en casa, en un equipo donde su opinión es valorada.
“Es genial tener un equipo en el que sientes que puedes influir y pedir ciertas cosas (…) Empecé a tener un poco de desmotivación con el deporte, y no puedo permitir que eso pase porque este deporte me ha dado todo. El día que deje el deporte, quiero irme con una gran sonrisa y mucho respeto, porque el deporte me ha dado todo”.
“Cuando empezaron las conversaciones con Cadillac y vimos esa pasión por las carreras, entonces sentí que aún tenía algo más dentro de mí”, indicó el mexicano, quien ahora, a unos meses de su regreso a la máxima categoría, considera que el año sabático fue un privilegio que aprovechó para tomar impulso con su familia y seres queridos.
