Max Verstappen se hizo con la victoria en el Nürburgring-Nordschleife en su debut con un coche GT3 en la 57ª edición del ADAC Barbarossapreis.
Formando equipo con Chris Lulham, el holandés se impuso en la novena carrera de las Nürburgring Langstrecken-Series, disputada en la versión de 24,358 km del trazado de las montañas de Eifel.
Tras ganar el ‘Permiso A’ hace un par de semanas, Verstappen regresó al legendario ‘Infierno Verde’, esta vez armado con el Ferrari 296 GT3 preparado por Emil Frey Racing, el mismo coche con el que ya había probado en el trazado alemán el pasado mes de mayo, entonces bajo el curioso seudónimo de ‘Franz Hermann’.
Para ser justos, también hay que decir que la clase SP9 en esta NLS9 no estaba llena de los mejores participantes (como los Porsches de Falken y Manthey, por ejemplo), pero correr a través de las diversas curvas complicadas, y en una parrilla de 110 coches, nunca es fácil, pero el dúo Verstappen/Lulham completó la tarea con maestría.
La semana pasada el piloto de Red Bull se hizo con el primer lugar en el Gran Premio de Azerbaiján y cerró el mes con broche de oro.