Willian Pacho cierra 2025 con el mejor año de su carrera: un auténtico tour de force deportivo que lo consagra entre los defensores más destacados del mundo. Con 55 partidos disputados, 4.392 minutos en cancha, seis títulos con el París Saint-Germain y tres distinciones individuales incluido un lugar en el 11 ideal de los premios The Best de la FIFA, el zaguero ecuatoriano ha elevado su figura a una dimensión histórica tanto para su país como para el fútbol internacional.
Hace apenas seis años, una joven promesa ecuatoriana publicaba en sus redes sociales una foto celebrando el título juvenil con Independiente del Valle junto a una frase que hoy parece casi profética: “Nunca olvides que cosas buenas le esperan a quien insiste, persiste y resiste.” Hoy, esas palabras resuenan como un mantra que define su carrera.
En 2025, Pacho no sólo fue el primer ecuatoriano en ganar la UEFA Champions League, sino también el primero en integrar el 11 ideal de los premios The Best de la FIFA, además de coronarse campeón de la Copa Intercontinental. Distinciones que consolidan su lugar en la élite del fútbol mundial.
A sus 24 años, acumula 12 títulos y decenas de reconocimientos individuales, un palmarés excepcional para un defensor que ya es referente y líder natural dentro y fuera de la cancha.
Pacho debutó como profesional el 2 de noviembre de 2019 con Independiente del Valle, en un día marcado por la tristeza: ese mismo día su madre, Glenda, falleció tras una dura batalla contra el cáncer. En homenaje a ella, eligió llevar el número 51 en su camiseta, un símbolo de fuerza y recuerdo permanente.
Desde sus primeras apariciones se destacó por su garantía en el juego aéreo, precisión en el mano a mano, serenidad en la toma de decisiones y una inteligencia táctica que desafiaba su juventud. Agentes y clubes europeos pronto pusieron sus ojos en él.
En enero de 2022 dio el salto al Royal Antwerp de Bélgica, donde su adaptación fue inmediata y su rendimiento le abrió las puertas al fútbol de mayor exigencia.
El 30 de marzo de 2023, Pacho fichó por el Eintracht Frankfurt en la Bundesliga por unos USD 9,7 millones en un contrato de cinco años. Allí se consolidó como un zaguero versátil y determinante, ganándose la confianza de técnicos, compañeros e hinchas.
Su rendimiento en Alemania no pasó desapercibido. En agosto de 2024 llegó al París Saint-Germain, un gigante europeo plagado de estrellas y ambiciones: el escenario perfecto para que Pacho elevara aún más su nivel.
Aunque su adaptación tuvo un proceso gradual, no tardó en ganarse un puesto de titular en el esquema de Luis Enrique, demostrando que su calidad no conoce de plazos ni pudores. Seriedad defensiva, anticipación, salidas limpias y personalidad para comandar la zaga: todo encajó.
Esta temporada fue, sin lugar a dudas, consagratoria. Pacho mostró una regularidad casi imbatible: dificilísimo recordar un mal partido o un error grosero en momentos críticos. Su aporte no fue solo defensivo, también se vio en anticipos precisos, conducción limpia del balón y hasta goles oportunos.
Marquinhos, su compañero de zaga, resumió así su impacto:
“Pachito es un monstruo. Es buena gente, trabaja muchísimo y tiene todas las cualidades de un defensor completo. Estoy feliz de tenerlo a mi lado.”
Por su parte, Luis Enrique destacó:
“Se adaptó desde el primer día. Aporta tanto en salida de balón como en aspectos defensivos, y sabe ganar duelos sin recurrir a faltas ni tarjetas. Es nivel top mundial, uno de los mejores defensores del mundo.”
En 2025, Willian Pacho se coronó campeón de:
- Ligue 1
- Copa de Francia
- UEFA Champions League
- Supercopa de la UEFA
- Copa Intercontinental de la FIFA
- Supercopa de Francia
Además, fue subcampeón en el Mundial de Clubes, cerrando un año que quedará grabado en la historia del deporte ecuatoriano.
Desde lo individual, fue incluido en el Equipo Ideal de la Ligue 1, nombrado Jugador Revelación de la temporada, y fue el único latinoamericano en el 11 ideal de los premios The Best de la FIFA.
Willian Pacho representa la figura completa del central moderno: físico, técnico, táctico y mentalmente preparado para las exigencias de la élite mundial. Su historia es un ejemplo de perseverancia, profesionalismo y grandeza.
Y a sus 24 años… aún no ha dicho su última palabra.
